Es un tipo de sistema de tracción donde el peso se distribuye a las cuatro ruedas del vehículo. Es beneficioso en determinadas circunstancias; por ejemplo, proporciona una mejor tracción en condiciones meteorológicas adversas, pero está diseñado primordialmente para la conducción fuera de carretera.
Esto permite que las cuatro ruedas se puedan mover de forma independiente arriba o abajo, dando lugar a una conducción más segura; por ejemplo, cuando se circula sobre baches.
La garantía de transmisión cubre determinadas partes del coche, como por ejemplo, el motor, la transmisión, el eje de transmisión, etcétera. Normalmente, es más larga que la garantía básica y se extiende durante un determinado número de años.
El radio de giro indica el giro más pequeño que un coche puede realizar. Con un radio de giro menor, es más sencillo efecturar una vuelta de 180 grados en un sólo intento, en lugar de tener que dar marcha atrás y adelante para girar por completo.
Las emisiones de dióxido de carbono del coche, medidas en gramos por kilómetro. Un coche que emite menos CO2 es menos contaminante y, por tanto, beneficioso para el medio ambiente.
Los coches híbridos funcionan con una mezcla de gasolina y energía eléctrica. Ofrecen varias ventajas comparados con los vehículos de gasolina. Por ejemplo, producen menos emisiones de CO2 y, gracias al ahorro en gasolina que comportan, resultan en una conducción más barata.
La tracción delantera es el más común de los sistemas de tracción y ofrece varias ventajas. Su fabricación resulta más barata (lo que reduce, por tanto, el coste final del vehículo) y además es más ligero, por lo que ayuda a ahorrar gasolina. Al tener el peso del motor sobre las ruedas delanteras, el agarre de las ruedas sobre el pavimento será mejor.
La garantía básica de un coche cubre una serie de aspectos básicos, excluyendo las partes del vehículo sujetas a desgaste natural, como los limpiaparabrisas o las pastillas de freno. Se extiende durante un determinado número de años o de kilómetros recorridos.
Las mejoras en tecnología de motor diesel han conseguido un ahorro en combustible comparado con los coches de gasolina (incluso, en algunos casos, con los híbridos). Además, emiten menos emisiones de carbono. Normalmente, resultan asimismo más seguros porque no pueden explotar, como en el caso de la gasolina.
Aún no hay reseñas
Sé el primero. Ayuda a nuestra comunidad compartiendo tu experiencia.
Escribir una reseña